Spot para TV que forma parte de la campaña “Tomar las aguas”, ideada por la agencia 134 Comunicación en colaboración con Estudio Grito Visual y producido por Crew Commercial & Film.
Hay una forma diferente de tomar las aguas.
Como si de una ensoñación se tratase, vemos a un hombre sentado de espaldas a un fondo neutro. Una mujer del mismo estilo que él, le tira un cubo de agua por detrás, su reacción es una mezcla entre sorpresa y alegría: “Hay una forma mejor de tomar las aguas…”. El agua al chocar con él nos transporta a unas idílicas imágenes de un balneario en el que ambos disfrutan relajándose y divirtiéndose.
La acción de tirar un cubo de agua a alguien encima es muy rápida, y el ojo puede perder detalles que visualmente resultan muy interesantes, de ahí que decidiésemos trabajar con cámara lenta para lograr alargar la escena, como si se desarrollase más lentamente, impresionando mucho más por el propio impacto visual que genera.
En Balnearios de Aragón, nos propusimos trabajar los sentidos y las sensaciones de bienestar con localizaciones reales, para que, tras ver el spot, el espectador quisiera disfrutar de esas emociones y experiencias.
Las localizaciones para nosotros son uno de los aspectos más importantes de la producción de cualquier proyecto publicitario, son una parte integral de la estética de marca de cualquier cliente. Por lo que, teniendo en cuenta los aspectos creativos y logísticos, nos desplazamos hasta diferentes espacios en Panticosa, Huesca, con el objetivo de encontrar lugares que desprendiesen espíritu y poesía propia. Además, para cerciorarnos de que la estética global del spot encajase, buscamos puntos donde trabajar las transiciones entre localizaciones de manera sutil y suave.
Desde Crew no solo tenemos en cuenta las ideas y requisitos estéticos, sino también las condiciones sonoras y lumínicas, la cobertura de planos, los costes, la disponibilidad de servicios, la facilidad de suministros y permisos, entre otros requisitos a la hora de presentar las localizaciones a la agencia, y, por ende, al cliente.
La paleta cromática fue trabajada en relación a las localizaciones, tras haber sido seleccionadas, en éstas destacaba la luminosidad, los azules y los blancos. Conforme a esto decidimos los tonos más armónicos y no demasiado estridentes para que la atención no se focalizará únicamente en los modelos y su vestuario, sino que siguiera la misma gama de color con la idea de crear un equilibrio estético y buscando influir en las emociones.
Los colores principales son los azules marinos, azules y azules turquesa (casi verdes), blancos, cremas, anaranjados, granates y marrones. Buscando generar sentimientos de simpatía, felicidad y tranquilidad. Los tonos fríos (azules-verdes) tienen unas cualidades más espirituales y naturales que combinados con los cálidos (anaranjados-granates) nos dan una sensación acogedora, de cercanía y calidez.
De esta manera logramos conseguir una imagen moderna, pero, al mismo tiempo, elegante y confortable. Un proyecto lleno de colores frescos y naturales, texturas y luces. Trabajado desde una visión lo más artística posible, desarrollando una línea estética efectiva y agradable. Y finalmente, percibiendo juventud y pasión a pesar de tener dos modelos adultos como protagonistas.
Fotografías realizadas por José Antonio Almunia